Con las vibraciones astrales que recibí de la luna de sangre del domingo pasado, tuve un momento de inspiración y quise venir a aconsejarlos sobre los tamales que deben pagar, en caso de que les haya salido el muñequito en la rosca, a la celebración del próximo 2 de febrero. Los tamales que lleven con sus amigos o a su trabajo no pueden ser cualquier tamal que se les cruce en la calle, ¡no, señores!, deben ser los que vayan de acuerdo a su personalidad para que realmente tenga sentido la celebración.
Por eso, he aquí, el oráculo tamalero de Madame Blablablá: