Ay, hijos míos, a estas alturas ya se nos complica muchísimo pensar como niños. ¿A poco no? La vida de adulto nos atrapa en sus redes de deudas, compromisos, tráfico, créditos, trabajo, etc. Por eso esta vez los quiero invitar a que se tomen un momentito en lo que me leen y que se propongan celebrar al doble este próximo Día del Niño. Y es que ahora que somos adultos solo pensamos en los regalos para nuestros pequeños y muuuy rara vez nos acordamos que nosotros también fuimos niños alguna vez. ¡Como si la infancia ya estuviera clausurada para nosotros! Salvo por la foto que subimos al Facebook de cuando éramos peques, no hacemos nada para consentirnos ese día a la par de nuestros hijos.
Yo, aunque no tengo hijos sí tengo sobrinos y los voy a consentir como se merecen, pero también tengo algunas ideas para celebrar que al menos, una vez al año, la Señora Blablablá se siente como la niña jarocha que tanto amaba ser antes de que se viniera la adultez encima.
Si aún no entiendes lo que te trato de decir, aquí te enlisto algunos tips para darte la consentida de la vida este 30 de abril. ¡Date chance y disfruta!
Entonces hay que relajarnos y dejar fluiiiiir, porque el mundo no se acaba si no regresas a trabajar con el bronceado del año, puedes pasar el puente haciendo un montón de cosas igual de divertidas para disfrutarlo al máximo.
Por ejemplo, ¿qué tal si haces una lista de todas las cosas que necesitas arreglar en casa? Mi papá les llamaba “errores de mecánico” y son esas fugas, grietas, humedades o cosas que hay que engrasar para que todo funcione bien pero que NUUUNCA tenemos tiempo de arreglar. Bueno, pues los días de asueto sirven perfecto para poner manos a la obra.
Otra cosa que puedes hacer es limpiar el closet siguiendo los consejos de Marie Kondo y deshacerte de todas esas cosas que ya no usas y donarlas a diferentes lugares. O se me ocurre que te das un maratón para ponerte al día con todas las series de moda, terminas ese libro que tienes desde hace 4 meses en la página 143 o te lanzas al súper por la despensa que necesitas para las recetas que te juras algún día prepararás y que nomás no. Quédate todo un día en el cine y échate unas 3 películas o disfruta un tour gastronómico a los restaurantes de moda. ¡Sal a caminar con tu perro y recorre la ciudad a pie o en bici! Visita un parque de diversiones o incluso podrías armar un fiestón en casa con todos tus amigos que tampoco saldrán de vacaciones. ¡Por opciones no paramos!
1. Un heladiux: en serio, cero remordimientos, de doble bola y en barquillo si es posible.
2.Una función en Cinemex: con un megacombo de palomitas y en una sala que te permita disfrutar al 100 de la película que más le tengas ganas. Entra a una función infantil y ríe a carcajadas, fíjate cómo los niños tienen cero empacho en el cine. ¡Imítalos!
3. Paga por un masaje especializado: ¡Basta!, te lo mereces. Consentirse y pagar de más a veces es complicado, pero un día al año para consentir tu cuerpo y tu mente… no tiene precio.
4. Visita un parque de diversiones: ¡Ah, súbete a la montaña rusa y piérdele el miedo! Se vale llorar, se vale gritar pero súbete y siente cómo se te voltea la panza 180° y gritarás de emoción.
5. ¡Cómprate un juego de mesa!: En Juguetron hay montonal para escoger, invita a tus amigos y desempolva tu habilidad para tirar esos dados. Los juegos de mesa despiertan esa mezcla de diversión y competencia que tanto nos hace falta sentir de vez en cuando.
6. Lánzate a los gokarts: Son divertidísimos, compite con otros adultos y acelera para sentir esa adrenalina dormida por las horas de estar encerrado en el tráfico.
7. Ve a jugar “maquinitas”: Así se decía en mi tiempo, pues, la cosa es que ya hay muchos lugares para comer pizza y divertirte con los juegos de destreza que funcionan con fichas. ¿Ya sabes de cuáles hablo? ¡Entretenimiento asegurado para chicos y grandes!
El 30 de abril debería ser una oportunidad para volver a sentir emoción, ingenuidad, esperanza, sorpresa y hasta confianza en los demás. Tal cual, como chamacos. Disfrutarlo al máximo depende de nosotros para que todos en casa, sin importar la edad, pasen un Día del Niño increíble.
