Sabemos que puede ser muy tentador compartir un poco de nuestra merienda con las mascotas, perooo, aunque no lo creas, este acto de buena fe puede traer graves consecuencias para su salud y bienestar
Desde el chocolate hasta la cebolla y el alcohol, existen diversos alimentos que son tóxicos para los animalitos y pueden ocasionar daños irreversibles como edema pulmonar, problemas respiratorios, hiperactividad o la muerte.
Con el fin de que protejas a tu mejor amigo y sepas cómo cuidar a su pancita, he preparado una lista de ingredientes que, según los expertos, nunca debes ofrecerle a tu mascota. ¡Toma nota!
Cebolla y ajo
No importa si están crudas o cocidas, dichas verduras son particularmente tóxicas para los perros y gatos. Entre sus muchos efectos, pueden causar irritación gastrointestinal, daño a los glóbulos rojos, taquicardia y cólicos severos.
Por si fuera poco, también ocasionan problemas respiratorios y anemia. ¡Cuidado!
Chocolate
Aunque este alimento está repleto de beneficios para el cuerpo humano, en el organismo de nuestras mascotas puede ser sumamente perjudicial. El chocolate amargo, particularmente, contiene un estimulante llamado teobromina que causa insuficiencia renal, enfermedades cardiacas y hemorragias internas.
Considéralo y sustituye dicho ingrediente por una carnaza con sabor a tocino o pollo. En Soriana encontrarás múltiples opciones que harán feliz a tu compañero y tu bolsillo.
Nueces de macadamia
Además de debilitar los músculos y el sistema nervioso de tu mascota, las nueces de macadamia provocan jadeos descontrolados, inflamación en las extremidades, problemas de coordinación y fiebre alta.
Mazorca de maíz
A pesar de que su estómago puede digerir el maíz perfectamente, sus granos son capaces de bloquear el intestino de tu amiguito y ocasionar pérdida de apetito, decaimiento, diarrea ocasional y dolor abdominal.
Tómalo en cuenta y asegúrate de ofrecerle alimentos que sean fáciles de masticar, por ejemplo: zanahorias cocidas, tiras de hígado a la plancha o pollito asado.
Aguacate
El aguacate es otro alimento venenoso para las mascotas. Sus hojas, semillas y frutos tienen una sustancia llamada anetol que es capaz de lastimar el recubrimiento intestinal y causar vómito y diarrea.
Edulcorante artificial
La goma de mascar, la mantequilla de maní y las bebidas energizantes contienen xilitol; un edulcorante artificial que, al ser ingerido por un perrito o gatito, puede ocasionar insuficiencia hepática, trastornos de la coagulación sanguínea y hemorragias.
Alcohol
El alcohol tiene un gran impacto en las mascotas, incluso cuando se ofrece en pequeñas cantidades. Esta bebida no sólo intoxica su cuerpecito, también ocasiona padecimientos gastrointestinales como diarrea, dolor agudo, vómito y distensión abdominal.
Cuida la salud de tu compañero y nunca, pero nuncaaa le ofrezcas alcohol u otras sustancias psicoactivas.
Sal
Muchas personas que elaboran dietas caseras para su mascota suelen utilizar la sal como el condimento principal, sin embargo, un consumo elevado de cloruro de sodio puede conllevar a una deshidratación extrema, agravar patologías cardíacas y provocar una intoxicación.
Si notas que tu amiguito vomita después de comer, tiene problemas para caminar o bebe agua con demasiada regularidad, es probable que alguno de sus alimentos tenga demasiada sal. ¡Mucho ojo!
Cerezas
Si bien los perros y gatos pueden ingerir la carne de las frutas, sus semillas, hojas y tallo son extremadamente tóxicos para su organismo. El cerezo negro americano y el de Virginia, especialmente, tienen cianuro y otras sustancias que son altamente mortales.
Tras su ingesta pueden aparecer diversos síntomas, como dificultad para respirar, encías rojas, pupilas dilatadas e incluso la muerte.
Masa de pan cruda
La levadura que utilizamos para elaborar pasteles y otras recetas contiene Saccharomyces cerevisiae; un hongo unicelular que puede intoxicar gravemente a nuestros compañeros.
Sus síntomas más importantes son gases, vómito, diarrea, malestar estomacal, cansancio extremo y mal humor.
Huesos cocidos
No importa si vienen de un caldito o una receta elaborada a las brasas, nunca debes ofrecerle un hueso a tu amiguito. Estos no solo ocasionan el debilitamiento de los dientes, también pueden obstruir la tráquea, lesionar el estómago y ocasionar heridas internas.
Para evitarlo te sugerimos apostar por huesitos crudos y carnosos, ¡tu perrito te lo agradecerá!
Toma las precauciones pertinentes y recuerda que siempre que notes alguna irregularidad, debes visitar a su médico de cabecera para revisar sus signos vitales y descartar cualquier padecimiento.
Mantente al pendiente de nuestros consejos y no olvides cuidar la alimentación de tu mascota.